Hemos pillado a un colaborador de "minifaldasytacones" en plenas fiestas del carnaval dando rienda suelta a sus instintos más básicos.
A veces no se sabe muy bien quien está disfrazado o quien realmente es que es así, y luego se pone el disfraz los otros 350 días del año.
En el fondo seguimos siendo unos cazurros.